Su ex cuñada le donó un órgano y le salvó la vida

El hospital Castro Rendón realizó una cirugía histórica, entre una donante viva sin relación sanguínea, con el receptor del órgano

Regionales04/01/2024Neuquen DataNeuquen Data
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El 11 de diciembre se realizó una cirugía histórica en el hospital Castro Rendón: un trasplante de una donante viva sin relación sanguínea con el receptor del órgano. Consistió en el implante de un riñón donado por la ex cuñada de un paciente con enfermedad renal terminal.

Diego, de 51 años, nació en Entre Ríos y vive en la zona. Es enfermero y perfusionista del hospital desde hace 9 años y fue quien recibió el riñón. “Tengo la enfermedad hace más de 20 años. Desde hace 4 años estoy en diálisis y supe hace tres años y medio que tenía que trasplantarme”, informó.

Cuando su entorno familiar se enteró de esa situación, la primera que le ofreció su riñón fue Gisella, su ex cuñada. “Salió todo muy natural –afirmó-. Nos conocemos hace más de 20 años: yo estaba casado con su hermana y mi hija es su ahijada; me siento parte de la familia. Fue muy lindo y natural. Cuando me ofreció, acepté enseguida”.

A pesar de lo complicado que era el panorama, Diego mantuvo una actitud positiva: “Siempre estuve convencido que de los riñones no me voy a morir. El espíritu siempre lo tuve en alta. Si hay un riñón que hubiese querido recibir, era el de ella. Así tenía que ser”, opinó.

Agregó: “Cuando el trasplante es de donante vivo la cirugía es mucho más sencilla, el riñón implantado comienza a funcionar más fácil, yo estaba muy tranquilo y a ella la vi tranquila también. Es un proceso que fue bien hecho: empezamos en abril con muchos pasos, el equipo del hospital fue increíble como trabajó, había muy buena onda de todos”.

Gisella tiene 47 años, es de Cinco Saltos, se dedica a la pastelería y es la otra protagonista de esta historia que funde altruismo, amor y bondad. “Para mí fue como ir a donar sangre. De hecho, a mis hijos se los hice ver así, para que no tuvieran miedo. No miré el riesgo que puede tener una cirugía si no el beneficio que le iba a provocar a él, porque se puede vivir bien con un solo riñón. Tomé la decisión sin consultar a mi familia y solo les dije lo que iba a hacer”, dijo.

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