Argentina busca apoyo financiero en plena tensión política en EE. UU.
Luis Caputo liderará una misión a Washington para reunirse con Scott Bessent y evaluar opciones de ayuda económica mientras persiste el cierre parcial del gobierno estadounidense.
Nacionales02/10/2025

El ministro de Economía, Luis Caputo, encabezará mañana una delegación oficial que viajará a Washington para mantener un encuentro con Scott Bessent, con el objetivo de explorar alternativas de financiamiento internacional y evaluar una posible asistencia financiera para Argentina.
Según confirmaron voceros del Palacio de Hacienda a Infobae, la misión estará integrada también por José Luis Daza, segundo del Ministerio de Economía; Pablo Quirno, secretario de Finanzas; y Santiago Bausili, titular del Banco Central (BCRA).
La reunión había sido anticipada públicamente por Bessent, quien señaló que tenía previsto un encuentro directo con Caputo y su equipo en la capital estadounidense, centrado en debatir opciones de ayuda financiera para el país.
Los equipos trabajarán durante el sábado y domingo, y podrían mantener reuniones al inicio de la próxima semana. Por el momento, no se definió la fecha de regreso, y desde el Ministerio destacaron que “la agenda se irá informando a medida que se concreten las reuniones”.
La misión encontrará una Washington “cerrada” debido al shutdown de la administración federal. Solo el personal indispensable está presente en los organismos oficiales de Estados Unidos, en medio de la tensión entre demócratas y republicanos por el presupuesto federal. Este conflicto podría influir indirectamente en las negociaciones, ya que la gestión de Donald Trump busca eliminar partes del Obamacare, una medida resistida por los demócratas, quienes cuestionan que se ayude a un país extranjero mientras se aplican recortes internos significativos.
Bessent, quien será el negociador principal con Caputo, criticó la actitud de los demócratas, afirmando que “quieren negociar como terroristas”, en declaraciones a CNBC, y destacó que la situación interna estadounidense complica la dinámica de las conversaciones sobre financiación internacional.







